Lo que a continuación presento es información más que nada para evitar y reducir el sarro.
Los causantes de tener los dientes amarillos pueden ser muchos, pero tener sarros entre los dientes ya indica que esta en proceso de un mayor daño.
El motivo principal de la aparición del sarro en los dientes se deben a la acumulación de residuos de alimentos que quedan en los límites entre las encías y en los lados de los dientes.
Porqué los sarros?
Bien, esas manchas o costras están formadas por restos de alimentos como ya dijimos, pero con una combinación de sales y minerales de la saliva, son partículas de deshechos que se van acumulando y al cabo de un tiempo se va solidificando hasta crearse el sarro lo cual ya se condiciona duramente entre los dientes. No es difícil identificarlos, ya que es de color amarillo y solido al tacto, pero es la indicación de que si no se trata pronto, sigue interactuando con ciertos alimentos dulces, que fuera del problema estético, desprende un tipo de ácido lo cual produce la caries.
Otros malos hábitos causantes de éstas manchas y que fomentan la aparición del sarro son el consumo del café, del té, refrescos, por igual fumar y beber alcohol y terminan por darnos una muy desagradable experiencia en dolores si no se trata a tiempo.
De la misma forma sucede cuando no nos cepillamos los dientes de forma habitual y lo último, la predisposición genética, o por herencia, aunque éste último, no es pretexto para no tener la higiene adecuada.
La mejor manera de tratar ésta infección siempre será visitando al dentista para que haga el apropiado examen y realice una completa y profunda limpieza.
A continuación presentamos 5 remedios caseros para prevenir la formación del sarro, y blanquear los dientes al mismo tiempo, aprovechando las bondades de ciertos elementos naturales o fáciles de conseguir.
1.- Bicarbonato de sodio:
Se trata de un método antiguo para mantener los dientes limpios y blancos y consiste en lo siguiente:
Ingredientes:
- 1 cucharada de bicarbonato de Sodio(10g)
- 1 cucharadita de sal(5g)
Preparación:
En un recipiente coloca el bicarbonato y la sal, con un poco de agua tibia, si nunca lo has probado aconsejamos hacerlo con un poco de agua y con precaución, ya que es bastante salado y/o de sabor desagradable.
Moja el cepillo de dientes con agua tibia antes y luego remoja las cerdas en la mezcla de bicarbonato y sal.
Cepilla como haces todos los días, pero prestando más atención a las áreas con sarro.
Repite, al menos, 2 veces al día (mañana y noche), en pocos días verás los cambios, incluso en el mismo día.
2.- Limón
El limón es otro de los blanqueadores dentales por naturaleza. Tomar precaución usándolo únicamente durante la noche, ya que al contacto con el sol provocan manchas.
El ácido del limón a su vez podría dañar o debilitar las piezas dentales; por lo que sólo debe hacerse como máximo 1 vez a la semana.
Ingredientes;
El jugo de ½ limón
½ taza de agua tibia (125 ml)
Preparación:
Exprime el limón en la taza de agua tibia y remueve.
Haz buches por toda la boca antes de irte a la cama, luego enjuaga con un poco de agua tibia para que no te quede el sabor ácido.
3.- Agua Oxigenada
Nos ayuda en aclarar los dientes y reducir el sarro, y después del cepillado normal, puede usarse hasta 3 veces a la semana como enjuague bucal, después de cepillarse.
4.- Semillas de Sésamo.
Nos ayudan mucho para desprender la suciedad acumulada en los dientes, solamente mastica unas semillas por 2 minutos, luego con un cepillo seco frotar todas las partes dentales, no olvides tirar las semillas masticadas. Termina por enjuagarte con abundante agua para limpiarte.
5.- Perejil.
Ésta hierba aromática tiene la capacidad de desprender el sarro, aparte de proporcionarnos numerosos nutrientes bebiéndola en jugo, que nos ayuda con la limpieza del riñón.
El método es simple, lava y pica bien las hojas de perejil, luego mezcla con un poco de agua hasta formar una pasta, colócala sobre los dientes por unos 3 minutos, enjuagarse luego con agua tibia abundante.
Con ésto terminamos el articulo de hoy, espero pudo haberse entendido y nos leemos hasta la próxima.
A continuación y a modo de enriquecer un poco más la información en cuestión, redactaré algunas sugerencias para ayudar con la limpieza y blancura de los dientes, especialmente para quienes nos encanta la fruta.
FRESA: Luego de lavarlas, comerlas crudas y a mordidas(importantisimo no cortarlas)
MANZANA: Comerlas con toda la cáscara, ya que ésta misma a demás de proporcionarnos fibra, nos limpia los dientes. Aconsejable hacerlo después de comer.
MELÓN: Es otra riquísima fruta que debemos aprovecharla ya que también nos ayuda a prevenir la acumulación de residuos de alimentos y evita e sangrado que aparece con el cepillado.
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